El fantasma/chaneque/prescencia/cosa de mi depa

Me daba un poco igual al principio y no estaba seguro de creer en él.

Pero después descubrí que al vato con el que vivo también le pasaban cosas raras, luego empezó a hacerlas cuando estábamos los dos e incluso a varios amigos les ha tocado cuando hace su "gracia".

La cual consiste en abrir de golpe la puerta principal del departamento.

Para que entienda usted estimado(a) lector(a) : (:a)

no soy muy bueno para esto jaja

clous op de la manija.

La manija sólo se abre jalándola hacia abajo, el ex compañero de depa (espero que sea ex) la abría de golpe cuando había alguien en la sala, no se abría de noche aunque se quedara sin seguro la puerta, ni cuando estaba solo en mi cuarto o en el baño, sólo cuando hay gente en la sala y se escucha y ve como un golpe en la manija, hacia abajo y la puerta se abre completamente.

Al principio creía que tal vez el cosito de metal que cierra la puerta no se atoraba bien y la puerta quedaba se abría con el viento o algo así pero he intentado dejarla así cerrada a medias y no se puede.

También la puerta del cuarto del otro wey se abre y se cierra bien seguido, y la del baño parece que alguien la está intentando abrir a veces.

Antes como creía que era sólo el viento o algo así cuando se abría la puerta decíamos de broma "pásale wey, chido" y cosas así pero cada vez empezó a ser más seguido y más intenso. Un día estaba intentando dormir y empecé a escuchar ruiditos extraños al pie de mi cama, lo más parecido que se me ocurre es alguien arrugando un plástico. Algo así. Lo estaba oyendo en ese estado entre dormido y despierto y cuando me dí cuenta que era un ruido real en mi cuarto me incorporé para ver y en eso sentí como si alguien corriera sobre mi cama, empezando por la cabecera de la cama, junto a mi cabeza y fueron como 3 pasos hacia mis pies.

Estoy seguro que no fué ningún sueño y se sintió clarísima la presión sobre el colchón. Procedí a mentar madres como pocas veces en mi vida e intentar dormir, sin mucho éxito.

Después en las vacaciones de verano un día me escribió mi rummeit y me dijo que se estaba cagando de miedo y que este wey/madre/fantasma/chaneque estaba haciendo un desmadre de ruidos afuera de su cuarto.

Otro día estábamos echando unas chelas aquí y un vecino vió a alguien pasar por la ventana del baño, el problema es que afuera del baño no puede haber nadie porque no hay piso, es el patio de los vecinos y da también a la ventana de mi cuarto, donde estaba la cabecera de mi cama antes de la noche que le menté a madre y cambié mi cama de lugar.

Al mismo vecino y otro amigo les ha tocado estar cuando abre la puerta y la otra vez nos dijeron que cuando pasa eso lo último que se debe hacer es invitarlos a pasar y decir que no hay pedo, según esto se toman muy en serio las palabras, por eso cuando les mientas la madre se van.

El día más cabrón fue uno que estábamos viendo una película (Estômago, muy buena, véanla) y se abrió la puerta, la cerramos y la seguimos viendo y ya en la noche que nos íbamos a jetiar yo empujé la puerta para cerrarla bien en caso de que fuera sólo viento. Pues todavía guardaba la esperanza de que fueran coincidencias y cosas raras nada más, pero justo después de eso, unos 4 o 5 segundos después de que empujara la puerta y a medio de una frase de alguno de los dos, hubo un golpe muy fuerte en la puerta, una presión hacia adentro y la manija se hizo unos 45° hacia arriba, en ese momento ese wey me dijo "¡no mames! ¿viste eso? noooo mames" o algo parecido, yo me puse a mentar madres todavía más cabrón que la vez de los pasos en mi cama. De ahí nuestra conversación murió de golpe y nos juimos a jetiar en corto los dos, bastante valientemente, cabe mencionar jaja.

Otro día le estábamos contando al vecino eso y al tratar de explicar cómo se movió la manija de la puerta nos dimos cuenta de que es imposible hacerla hacia arriba. Nos paniqueamos bien chido. Y el vecino se paniqueó cuando subió al techo y desde ahí vió que no hay piso afuera del baño, y nos contó que en su depa dan golpecitos en la puerta, en la noche.

Nuestras soluciones para la situación al parecer fueron efectivas, ese wey puso un vaso con agua y azúcar en el piso y yo proseguí con las mentadas de madre dirigidas a lo que sea que abría la puerta.

Actualización: no sé si sea lo mismo pero acaba de pasar algo realmente extraño, mi rumeit estaba tragando papaya en la cocina, como a 3 metros de mí, de pronto fué a su cuarto y en el camino le dije algo, después regresé mi mano al cosito tapetoso que sirve de mouse en las laptops y había papaya justo ahí. Estuvo muy raro, es medio ilógico que haya volado un pedacito de papaya del tamaño de la yema de mi dedo y haya caido justo en el teclado, aparte fue cosa de un segundo, lo estaba usando y no había nada, levanté la vista y ya había papaya ahí, y ese wey estaba caminando hacia su cuarto, y la papaya en un plato hondo en la cocina. Chale...

Esta vez es personal, hay pocas cosas en el mundo que odie tanto como la papaya.

Por si las dudas, más mentadas de madre!